miércoles, 27 de marzo de 2024

Signos radiológicos de Osteoartritis Erosiva en manos.

 


Pinzamiento de interfalángicas proximales de segundo tercero y cuarto dedos derechos y de la interfalángica distal del segundo dedo bilateral, con erosiones óseas. Obsérvese el respeto por las metacarpofalángicas bilateralmente. Rizartrosis del pulgar bilateral.

Diagnóstico: osteoartritis erosiva especialmente de la mano derecha.


Osteoartritis Erosiva.

La OA erosiva es un subconjunto poco común y particularmente agresivo de la OA de la mano. Se presenta con un inicio subagudo o insidioso de dolor, rigidez, hinchazón de los tejidos blandos y, a veces, parestesias que afectan múltiples articulaciones interfalángicas (es decir, inicio poliarticular sincrónico). En comparación con la OA nodular de la mano (nódulos de Heberden, y de Bouchard), el dolor, la sensibilidad y la inflamación (calor, hinchazón de los tejidos blandos, a veces eritema) son más marcados y prolongados, y la OA erosiva no se asocia con la OA generalizada (OA). La OA erosiva afecta únicamente a las articulaciones interfalángicas (las articulaciones IFP con más frecuencia que las articulaciones IFD) y generalmente respeta las bases del pulgar y las articulaciones MCP ( imagen ).

 


Imagen: OA erosiva de la mano con marcada desviación radial y deformidad fija en flexión en la articulación IFP media izquierda, desviación radial con restricción en la articulación IFP índice e hinchazón ósea de ambos dedos. Obsérvese la ausencia de los nódulos de Heberden.

La inestabilidad lateral en las articulaciones interfalángicas es un hallazgo ocasional pero característico ( imagen ), y también puede ocurrir una fusión espontánea de la articulación interfalángica (la fusión articular no es una característica de la OA).

 


Imagen: Marcada inestabilidad radial/cubital en un paciente con OA erosiva. Esta inestabilidad no suele ocurrir en la OA de mano común.

 

En raras ocasiones, puede haber una deformidad con los gemelos, y los nódulos de Heberden y/o Bouchard pueden coexistir.

 

La OA erosiva tiene peores resultados en términos de persistencia de síntomas y deterioro funcional que la OA de mano no erosiva. Aunque la OA erosiva como entidad clínica es rara, las erosiones subcondrales radiológicas están presentes en solo una o unas pocas articulaciones en hasta el 8,5 por ciento de los pacientes con OA sintomática de la mano.