Es una paciente de 20 años de edad con un cuadro
clínico de 20 días de evolución con la aparición de una lesión en miembro
inferior izquierdo no pruriginosa no dolorosa, posteriormente la lesión crece
en tamaño y a la semana empiezan a
aparecer lesiones en distintas partes del cuerpo como se aprecia en las
imágenes. No antecedentes de importancia relevantes, no exposición a Ríos ni a
piscinas. Dice la paciente que unos días antes de comenzar con la placa
heráldica presentó una infección respiratoria
aparentemente viral que cursó en forma benigna y de la cual se recuperó sin
tratamiento.
En las primeras imágenes se observa como iniciaron
las lesiones y en las otras como posteriormente evolucionaron
No presenta lesiones en la palma de las manos
VDRL (-).HIV (-). RASPADO DE LESIONES NEGATIVOS PARA
HONGOS.
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Placa heráldica |
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Placa heráldica |
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Placa heráldica |
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Lesiones eritematoescamosas levemente pruriginosas en tronco que aparecieron una semana después de la placa heráldica |
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Lesiones eritematoescamosas levemente pruriginosas en tronco que aparecieron una semana después de la placa heráldica |
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Lesiones eritematoescamosas levemente pruriginosas en tronco que aparecieron una semana después de la placa heráldica |
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Lesiones eritematoescamosas levemente pruriginosas en tronco que aparecieron una semana después de la placa heráldica |
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Lesiones eritematoescamosas levemente pruriginosas en tronco que aparecieron una semana después de la placa heráldica |
PITIRIASIS ROSADA
La Pityriasis rosea, Pitiriasis rosada o pitiriasis
de Gibert1 es una erupción aguda de la piel, benigna, que posee una evolución
conocida y distintiva. Sus lesiones iniciales son una placa heráldica que es
seguida en una o dos semanas por una erupción generalizada secundaria con una
distribución característica y que dura unas seis semanas.2 3
Las causa de la pitiriasis rosada es desconocida,
aunque comúnmente se cree que su origen reside en un herpesvirus del grupo 7.
La pitiriasis rosada puede afectar a miembros de
ambos sexos. Afecta con mayor frecuencia a niños, adolescentes y adultos
jóvenes de alta capacidad reproductiva. La mayoría de personas que la padecen
tienen entre 10 y 35 años de edad. La condición tiene una mayor incidencia en
primavera y otoño.
Por lo general no es contagiosa y posee una
virulencia sumamente limitada, aunque ha habido casos de pequeñas epidemias en
hermandades y bases militares .
SÍNTOMAS
Los síntomas incluyen:
Una infección respiratoria puede preceder a todos
los demás síntomas hasta en un 68,8% de los pacientes.4
Clásicamente aparece una zona ovalada de color rosa
o pardo, el llamado "placa heráldico" (veces también se denomina
"mancha heráldica" o "mancha madre" o “escudo heráldico”),
de 2 a 10 cm localizada en el pecho o en la espalda.5 6 En ocasiones, la placa
heráldica puede aparecer en una posición oculta (en la axila, por ejemplo) y no
notarse de inmediato. La placa heráldica también puede aparecer como un grupo
de pequeñas manchas ovaladas, y ser confundido con acné. En raras ocasiones, no
aparece en absoluto.5
Después de 7-14 días, de la placa heráldica,
aparecen erupciones en el torso en forma de grandes manchas rosas o rojas,
escamosas, de forma ovalada.5 En el 6% de los casos puede ocurrir una
distribución inversa, con la erupción sobre todo en las extremidades.7 En
general, la mayoría de las manchas ovaladas se reparten primero por el pecho,
siguiendo la línea costal, formando una distribución característica de
"árbol de Navidad".5 Varios días después pueden aparecen pequeñas
erupciones circulares en la espalda y el cuello. Es inusual que se formen
lesiones en la cara, pero pueden aparecer en las mejillas o en la línea del
cabello.
Aproximadamente una de cada cuatro personas con
Pityriasis rosea sufren de picor leve o grave sintomático. (Es mucho más común
una picazón moderada de la piel debido a un exceso de sequedad, sobre todo si
el jabón se utiliza para limpiar las zonas afectadas.) La comezón es a menudo
no específica, y se agrava si se rasca. Esto tiende a desaparecer cuando se
desarrolla la erupción, y no suelen mantenerse durante todo el curso de la
enfermedad.5
La erupción puede estar acompañada de un ligero
dolor de cabeza, fiebre, náuseas y fatiga física.
La erupción puede aparecer también en mamas
TRTATAMIENTO
En general, al ser una enfermedad de carácter
autolimitada, el manejo se limita al alivio sintomático, empleando antihistasmínicos
de primera generación por su efecto sedativo para el alivio del prurito. Otra
de las terapias empleadas es el uso de corticoides tópicos de mediana potencia
(betametasona) sobre las lesiones para disminuir la inflamación y el prurito.
La luz ultravioleta ha tenido resultados positivos en la pitiriasis rosada. La
fototerapia puede ser considerada en pacientes con casos severos y con gran
compromiso cutáneo. Aún falta la realización de otros estudios para comprobar
la real efectividad de la fototerapia.
En un estudio simple-ciego no aleatorizado, se
observó que altas dosis de aciclovir por una semana, fueron beneficiosos en
cuanto a acortar el periodo del cuadro (de 38 a 19 días) además de disminuir la
aparición de nuevas lesiones. Este tipo de estudios sugiere el efecto
beneficioso del aciclovir durante la etapa sintomática del cuadro.8
1) http://www.menarini.es/images/dermatopatologia/Derma115.pdf
Freedberg, et.
al. (2003). Fitzpatrick's Dermatology in General Medicine. (6th ed.).
McGraw-Hill. ISBN 0-07-138076-0.
2) James, William;
Berger, Timothy; Elston, Dirk (2005). Andrews' Diseases of the Skin: Clinical
Dermatology. (10th ed.). Saunders. ISBN 0-7216-2921-0.
«Erythromycin in
pityriasis rosea: a double-blind, placebo-controlled clinical trial». J
Am Acad 3) Dermatol 42 (2 pt 1): 241.
«Pityriasis rosea». American Academy of Dermatology.
2000, 2003. Archivado desde el original el 22 de noviembre de 2015. Consultado
el 4 de junio de 2009.
4) Thomas P (2004),
Clinical Dermatology: A Clinical Guide to Diagnosis and Therapy (4th edición),
Mosby, pp. 246–8, ISBN 0-323-01319-8
Tay, Y; Goh, C (829). «One-year review of pityriasis rosea at the National
Skin Centre, Singapore». Ann Acad Med Singapore 28 (6).
5) PubMed TI Use of
high-dose acyclovir in pityriasis rosea.AUDrago F, Vecchio F, Rebora A SOJ Am Acad
Dermatol. 2006;54(1):82.
Horn T, Kazakis
A (1987). «Pityriasis rosea and the need for a serologic test for syphilis».
Cutis 39: 81.
6) Arndt, KA
(1983). «Treatment of pityriasis rosea with UV radiation». Arch Dermatol 119:
381.
Leenutaphong V,
Jiamton S (1995). «UVB phototherapy for pityriasis rosea: a bilateral
compatison study». J Am Acad Dermatol 33 (6): 996.
Kempf, W; et al
(1999). «Pityriasis rosea is not associated with Human herpesvirus 7». Arch 7) 7) Dermatol 135 (9): 1070.
8) Chuang, T-Y; et al (1982). «Pityriasis rosea in Rochester, Minnesota, 1969 to
1978: a 10-year epidemiologic study». J Am Acad Dermatol 7:
80.