martes, 21 de abril de 2009

Paciente de 23 años con deterioro neurológico progresivo

Un paciente masculino de 23 años en Cuba, es llevado a un hospital por un familiar debido a mal estado general, astenia y pérdida de 10 kg de peso en los últimos 10 meses, asociado a pérdida de apetito. También se quejaba de erosiones dolorosas en la lengua cubiertas por un exudado blanco adherente. Tres días antes del ingreso, el paciente desarrolló una progresiva declinación de su estado mental que evoluciona a somnolencia y a confusión mental. Posteriormente, en la internación fue encontrado estuporoso por la enfermera. Rápidamente después comenzó a presentar convulsiones tónico-clónicas generalizadas y desarrolló hemiparesia izquierda. Los familiares dijeron que el paciente se había quejado de cefalea severa, pero negaron que se quejara de dolor en cuello, rigidez ni fiebre. El paciente no tenía antecedentes de traumatismo. No tenía factores de riesgo conocidos para tuberculosis, ni había tenido contacto con personas enfermas. No tomaba medicamentos. No había antecedentes familiares de enfermedades. En su historia personal, lo único destacable era su condición homosexual.
En el examen físico, mostraba alteración del estado mental, temperatura 36,5ºC, el pulso de 100 por minuto, su TA de 100/50 mmHg, y su frecuencia respiratoria de 16 por minuto. La auscultación cardíaca era normal, sin soplos ni frote. Los pulmones se auscultaban limpios. La palpación del abdomen no revelaba alteraciones, no dolía, ni se palpaban masas, o agrandamiento de hígado o bazo. Sus membranas mucosas estaban pálidas y la lengua presentaba un exudado blanco adherente, que cuando se raspaba dejaba una superficie sangrante y con úlceras. El examen neurológico revelaba estado mental estuporoso, con una franca hemiparesia izquierda, con parálisis facial, y Babinski. No se observaron alteraciones pupilares.
El laboratorio mostraba anemia con una concentración de hemoglobina de 9,4 g/dl y un hematocrito de 29%. El recuento de blancos era normal excepto que tenía 63% de linfocitos. La eritrosedimentación era de 62 mm/hora. Los electrolitos y las enzimas hepáticas estaban normales. El líquido cefalorraquídeo no se obtuvo debido a la preocupación por probable hipertensión endocraneana. Se llevó a cabo una TAC de cerebro (Figuras 1-4) y estudios serológicos específicos para confirmar el diagnóstico.




En base a los hallazgos de la TAC, cuál es el diagnóstico?






A)Toxoplasmosis de SNC
B) Glioblastoma multiforme.
C) Hemorragia subaracnoidea.
D) Linfoma de sistema nervioso
primario













La TAC sin contraste reveló una gran lesión hipodensa localizada en hemisferio cerebral derecho, tálamos bilaterales, y ganglios basales, extendiéndose hacia el centro semioval, con leve compresión del ventrículo lateral derecho. La subsecuente administración de contraste resultó en un realce de la zona periférica de la lesión, en un típico patrón “en anillo”, sugestivo de toxoplasmosis de sistema nervioso central (imágenes no disponibles).

La toxoplasmosis es causada por un protozoario, el Toxoplasma gondii. (2,3) El organismo es un parásito coccidio ubicuo que infecta a más de 50% de los individuos en algunas poblaciones, pero que comúnmente no causa enfermedad activa. Existen 3 formas:

1) Ooquistes que son excretados por las heces del gato (huésped definitivo),
2) Taquizoitos, que se multiplican intracelularmente, y
3) Quistes tisulares, los productos finales de esta multiplicación intracelular, en los que puede persistir como parásito viable en el cerebro y en el músculo estriado durante toda la vida del huésped.

La toxoplasmosis usualmente ocurre vía ingestión de los ooquistes o de los quistes tisulares. La infección tiene 4 estadios: agudo, subagudo, crónico, y reactivación. Después que el organismo invade y se multiplica dentro del tracto gastrointestinal, se disemina a través del sistema linfático y sanguíneo a órganos distantes (estadio agudo). La respuesta inmune celular y humoral, entonces, suprimen la progresión de la enfermedad y limitan la diseminación generalizada del parásito. En huéspedes inmunocompetentes, el parásito se enquista, y así persistirá sin proceso ningún proceso inflamatorio (estadio crónico). Cuando el huésped se transforma en inmunocomprometido, se liberan los bradizoitos y el parásito se transforma en un agente oportunista causando enfermedad.
Las manifestaciones del sistema nervioso central son la forma más frecuente de enfermedad, y ocurre en 10-25% de los pacientes con SIDA. La afinidad de T gondii por el tejido cerebral se ha atribuido a la baja inmunidad local en dicho órgano.
Las manifestaciones son inicialmente proteiformes e insidiosas. Pueden aparecer signos neurológicos focales asociados a disfunción cerebral generalizada (somnolencia que evoluciona a coma) y a menudo acompañados por trastornos del lenguaje. Pueden aparecer convulsiones focales o generalizadas. Hemianopsia, afasia, ataxia, y parálisis de pares craneales pueden también observarse. Puede haber febrícula y cefalea progresiva. Los signos clínicos de toxoplasmosis de sistema nervioso central son típicamente vagos y variables entre los pacientes, así que es importante confirmar el diagnóstico llevando a cabo imágenes y estudios serológicos. (2,3)
Muchas otras condiciones pueden simular toxoplasmosis de SNC, tales como meningitis crónica (sifilítica o micótica), encefalitis por citomegalovirus, encefalitis por herpes simplex, encefalitis por HIV, linfoma primario de SNC, leucoencefalopatía multifocal progresiva, y neoplasias (MTTS cerebrales). En pacientes con anormalidades neurológicas focales, la presencia de enfermedad cerebrovascular (stroke) debe ser descartada. (2,3)
Aunque la serología es esencial para confirmar el diagnóstico, tales test no son diagnósticos en si mismos, ya que gran parte de la población normal también tiene anticuerpos. Los títulos progresivamente crecientes de IgG son usualmente observados, y una IgM alta es observada en casos de toxoplasmosis recientemente adquirida. El título de anticuerpos puede ser inesperadamente bajo en pacientes con SIDA, aún en presencia de enfermedad activa. El aislamiento de T gondii de la sangre, o de los fluidos corporales, o la identificación de taquizoitos en las biopsias de tejidos o frotis de fluidos (como líquido cefalorraquídeo), significa infección aguda. La amplificación por reacción en cadena de polimerasa (PCR) para la detección de DNA de T gondii puede ser claramente usada para establecer el diagnóstico de infección aguda. (3)
Las imágenes son esenciales en el diagnóstico de toxoplasmosis de SNC. La TAC puede revelar lesiones hipodensas únicas o múltiples con posible efecto de masa. En 70%-80% de los casos hay realce homogéneo con contraste endovenosos con un patrón “en anillo”. La toxoplasmosis difusa puede aparecer en las imágenes con un patrón normal o con hallazgos sugestivos de encefalitis por HIV. La RMN es más sensible en la demostración de lesiones múltiples. Cuando una lesión única es encontrada en pacientes con SIDA y manifestaciones clínicas de compromiso de SNC, el primer diagnóstico a considerar es linfoma primario, pero no puede descartarse toxoplasmosis. Las lesiones múltiples pueden ser incorrectamente interpretados como metástasis múltiples, en pacientes sin historia conocida de infección por HIV, por lo tanto hay que considerar HIV y toxoplasmosis de SNC en un paciente en quien se plantea diagnóstico de metástasis cerebrales múltiples. Finalmente La tomografía computada por emisión de fotón único (SPECT) puede ser útil en diferenciar toxoplasmosis de linfoma. Cada vez que el diagnóstico sea incierto, una biopsia cerebral es recomendada. Esta opción generalmente se plantea en el contexto de una lesión única con resultados serológicos negativos y sin respuesta a la terapia empírica. (2,3)
El tratamiento de la toxoplasmosis es a menudo empírico en un contexto clínico apropiado mientras se espera el resultado de los test. El régimen standard para el tratamiento de la infección aguda es una combinación de 3 drogas administradas por 6 semanas: pirimetamina, sulfadiazina, y ácido folínico. Cotrimoxazol (trimetoprima-sulfametoxazol) puede ser usado como régimen alternativo; es mejor tolerado y no hay diferencias en los resultados clínicos. En casos de alergia a las sulfodrogas, clindamicina, claritromicina, azitromicina, o atovacquona combinadas con pirimetamina y ácido polínico son alternativas viables. El tratamiento de la infección aguda debe durar 4 a 6 semanas y debe ser seguido de terapia a dosis reducida a largo plazo. La iniciación de terapia antiretroviral altamente activa (HAART) es importante en el tratamiento de la infección aguda. La terapia supresiva de mantenimiento debe continuar hasta que el conteo de CD4 permanezcan por encima de 200 células, y que las lesiones en la RMN hayan desaparecido. (1)
En este paciente, los antecedentes de homosexualidad, combinado con hallazgos en el examen físico en la lengua compatibles con candidiasis condujo a la sospecha de infección por HIV. Debido a que el estado neurológico del paciente había declinado y que había posibilidades de inmunodeficiencia, se tomó la decisión de tratarlo como meningitis bacteriana, y tratarlo además empíricamente para toxoplasmosis de SNC, dado los resultados de la TAC sin contraste y a la espera de los resultados serológicos. Una punción lumbar fue considerada pero fue diferida por la probabilidad de complicaciones asociadas a hipertensión endocraneana. Se inició también tratamiento antiretroviral con HAART.
Con el tratamiento, el estado mental del paciente mejoró, en poco tiempo, volviendo a estar mentalmente normal. La infección con HIV fue confirmada por estudios serológicos (ELISA y Western blot).
El paciente fue dado de alta con una leve alteración del lenguaje y discreto déficit motor en su pierna izquierda.

En base a los datos anteriores:

Cuál de las siguientes manifestaciones clínicas son comúnmente vistas en casos de toxoplasmosis de SNC?

1) Convulsiones.
2) Déficit neurológicos focales.
3) Trastornos del lenguaje.
4) Coma.
5) Todas las anteriores


Respuesta correcta: (5) Todas las anteriores.

Cuál de las siguientes condiciones es más probable en pacientes con SIDA y una masa única encontrada en los estudios de imágenes?

1) Metástasis cerebrales.
2) Linfoma primario de SNC.
3) Leucoencefalopatía multifocal progresiva.
4) Encefalitis por CMV.
5) Stroke

Respuesta correcta (2) Linfoma primario de SNC

Traducido de : “Progressive Neurologic Deterioration in a 23-Year-Old Man” CME/CE
Manuel Salinas, MD
Manuel Salinas, MD, Assistant Professor, "Dr. José Assef Yara" Ciego de Avila School of Medicine. Staff Physician and Mortality Committee Chairman, Department of Internal Medicine, "Dr. Antonio Luaces Iraola" Ciego de Avila University Hospital, CubaDisclosure: Manuel Salinas, MD, has disclosed no relevant financial relationships.
Laurie E. Scudder, MS, NPAccreditation Coordinator, Continuing Professional Education Department, Medscape, LLC; Clinical Assistant Professor, School of Nursing and Allied Health, George Washington University, Washington, DC; Nurse Practitioner, School-Based Health Centers, Baltimore City Public Schools, Baltimore, MarylandDisclosure: Laurie E. Scudder, MS, NP, has disclosed that she has no relevant financial relationships.
Rick Kulkarni, MDVice President/Medical Director, WebMD; Editor-in-Chief, eMedicine; Assistant Professor of Surgery, Yale University School of Medicine, New Haven, ConnecticutDisclosure: Rick Kulkarni, MD, FACEP, has disclosed no relevant financial relationships.
Erik D. Schraga, MDErik D. Schraga, MD, Clinical Instructor of Emergency Medicine, Stanford/Kaiser Emergency Medicine Residency Program, Department of Emergency Medicine, Kaiser Permanente, Santa Clara Medical Center, Santa Clara, CADisclosure: Erik D. Schraga, MD, has disclosed no relevant financial relationships.
Michael S. Bronze, MDMichael S. Bronze, MD, Stewart Wolf Professor, Chairman of the Department of Medicine, University of Oklahoma Health Science Center, Oklahoma City, OKDisclosure: Michael S. Bronze, MD, has disclosed no financial relationships.
S.A. Jamal Bokhari, MDS. A. Jamal Bokhari, MD, Associate Professor of Radiology - Yale University School Of Medicine. Section Chief Emergency Radiology, Assistant Program Director Radiology Residency - Yale New Haven Hospital, New Haven, CTDisclosure: S. A. Jamal Bokhari MD, has disclosed no relevant financial relationships.
Luis M. Soler, BALuis M. Soler, BA, Associate Editor, eMedicine/WebMD, New York, NYDisclosure: Luis M. Soler, BA, has disclosed no relevant financial relationships.
Published: 04/08/2009

Referencias bibliográficas

1) Arens J, Barnes K, Crowley N, Maartens G. Treating AIDS-associated cerebral toxoplasmosis - pyrimethamine plus sulfadiazine compared with cotrimoxazole, and outcome with adjunctive glucocorticoids. S Afr Med J. 2007;97:956-58.
2) Ozgiray E, Oner K, Ovul I. HIV related toxoplasmic encephalitis mimicking multiple metastasis: case report. Turk Neurosurg. 2007;17:207-10.
3) Singh NN, Thomas FP. HIV-1 Associated Opportunistic Infections - CNS Toxoplasmosis. eMedicine from WebMD Last updated: February 23, 2007. Available at: http://emedicine.medscape.com/article/1167298-overview. Accessed April 1, 2009.
4) Barlett JG, Gallant JE. 2001-2002 Medical Management of HIV Infection. Baltimore, Md: John Hopkins University Division of Infectious Diseases and AIDS Services; 2001.